El festival WAN se celebró en la Nueva Cubierta de Leganés, colgando el cartel de sold out. Uno de los acontecimientos techno del año, con más de 10.000 personas recibiendo el nuevo año en Madrid.
El primer set fue para Boris Brejcha, una actuación del DJ alemán que gustó mucho, potenció el baile y disfrute de la gente, con una altísima calidad técnica que combinaba perfectamente con el espectáculo audiovisual.
Artistas como Solomun antes de marchar a Tulum para tocar en el Sound Tulum 2019, fue recibido posteriormente con los brazos en alto.Comenzó su actuación con melodías que tocan el espíritu, y con graves que nos transportan al espacio exterior. Una auténtica clase magistral de techno melódico con ritmo y a juicio de los fans, la mejor actuación de la noche.
Sesión con una progresión perfecta, ideal para dar paso al canadiense Richie Hawtin que puso el stage del revés con su característico techno minimal que nos llevó a la locura en un set elegantemente contundente. Para muchos también el mejor de la noche.
Una de las cosas que cabe destacar en todas estas actuaciones, era la producción audiovisual, el sonido, que era realmente bueno, llegaba bien tanto al escenario como a las gradas y a pesar de que el recinto tuviera una enorme cubierta, no había eco.
Posteriormente Luciano, quién supo llevar muy bien las riendas en un set technero con mucho groove y muchos brazos arriba que le acompañaron en cada mezcla. Con una ovación bien merecida, el artista chileno le cedió el puesto a los grandes Gonçalo y Raúl Pacheco que en una sesión épica en formato B2B, nos hizo gastar suela a todos con mucho gusto, y con mucho ritmo. .
Llegó el momento de la última actuación de la noche de la mano de uno de los capos italianos del techno.
Joseph Capriati tuvo el privilegio de cerrar el magnífico festival con una sesión espectacular con su característico sonido underground. Buen techno, vocales sugerentes y energía pura, fueron los principales ingredientes que sumados a su buen hacer tras los platos, como resultado obtenemos un cierre colosal cuando sin darnos cuenta, llegaron las 7 de la madrugada, y llegó el momento de empezar el año.